Wildfang es más que una simple empresa de moda, sus dos socias fundadores la califican como un estilo de vida. La empresá se fundó en 2012 con poco más que el dinero que tenían en sus bolsillos pero con un destino muy claro, proporcionar el mejor estilo para las mujeres pero inspirado en la moda masculina. Wildfang significa «marimacho» en alemán, término con el que ellas se identifican, pero a su vez le otorgan ese doble significado que podemos interpretar en inglés, como es «niño salvaje» o «sinvergüenza».
En su primer espacio comercial pretenden crear un ambiente experimental, atractivo y envolvente para el cliente y en el que tanto la propia marca como cada usuario se sientan como en casa. El diseño de la tienda es distinto y divertido con elementos extravagantes integrados en el espacio. Junto a la exhibición de productos también hay objetos de carácter nostálgico para hacer recordar al visitante su infancia. Los probadores a modo de tienda cónica «tepee» también dan un toque lúdico a la experiencia a de compra.
Se observa una mezcla fresca de materiales, con un amplio uso de la madera en todas sus zonas. Las formas geométricas, el repetido uso del triángulo tanto en mobiliario como en objetos decorativos y los colores bibrantes usados en los percheros, crean una sensación de espacio urbano y moderno. Los valores de la marca son: «ser atrevido, audaz e inspirador», lo que el interior de la tienda se representa a la perfección.
