Este pasado verano abrió sus puertas El Pintón, un restaurante ubicado en pleno centro de Sevilla muy próximo a la catedral de la ciudad hispalense. Cuenta con una propuesta gastronómica basada en el producto en la que armonizan a la perfección las mejores tapas, las recetas más clásicas de la cocina mediterránea y una amplia y elaborada carta de coctelería.
El objetivo principal del Estudio Lucas y Hernández-Gil era crear un vínculo entre la arquitectura tradicional con un planteamiento mucho más contemporáneo y renovado respecto al típico patio andaluz. El estudió se encargó tanto del diseño interior, del diseño gráfico, como del mobilairio, realizando un proyecto completo de branding y dotando a sus espacios de un aspecto renovado y acogedor.
Se eliminaron todas las intervenciones que se habían realizado anteriormente en el espacio, revelando las características y texturas originales y logrando así un aspecto mucho más auténtico. Los 250 m² del local se distribuyen en torno al patio central, dando lugar diferentes áreas y ambientes. Tanto para el mobiliario como para la iluminación se optó por combinar en la mayoría de piezas materiales como el metal y la madera, muchas de estas fueron creadas por los propios diseñadores y otras tantas de firmas conocidas.
Uno de los rincones más destacables es la pared en la que se ubica un mosaico de azulejo clásico en tonos amarillos y azules, en este caso se ha optado por un mobilairio en los mismo tonos con líneas contemporáneas pero que recuerdan a lás clásicas sillas de enea, creando una perfecta armonía de colores y formas.
